Durante su estancia en Puerto Rico (1899 a 1909,) Nuestra Madre hizo una serie de profecías que fueron preservadas por sus llamados discípulos. Estas fueron recopiladas por el sacerdote benedictino Jaime Reyes Maldonado durante su investigación de los hechos acaecidos en La Santa Montaña y sus alrededores e incluidos en un libro de su autoría.

Las profecías recopiladas por el padre Reyes son las siguientes:

• Cuando aquellos que suban a la [Santa] Montaña no pongan aceite en la lámpara, la que está abajo junto una de las puertas, la montaña se oscurecerá.

• Mi trabajo será olvidado, pero los pequeños lo volverán a poner en marcha y los grandes lo terminarán con gran esplendor.

• La [Santa] Montaña caerá, pero volverá con más fuerza.

• Cuando me vaya, la [Santa] Montaña volverá a la oscuridad, pero eventualmente mucha gente subirá a la [Santa] Montaña como hormigas.

• Cuando me vaya, la [Santa] Montaña caerá, pero eventualmente florecerá como una rosa.

• La [Santa] Montaña brillará nuevamente con un hombre santo en la Santa Peña.

• Cuando me haya ido, vendrán hombres que continuarán mi misión.

• Un camino pasará a través de la [Santa] Montaña. 

• Aquellos que estén en problemas, que escalen la [Santa] Montaña, eso será la salvación para muchos.

• El agua escaseará, pero el manantial de la [Santa] Montaña siempre tendrá su bálsamo. Cuando el agua se seque en otros lugares, no faltará en la Montaña. 

• La [Santa] Montaña tendrá una aldea y gente vendrá de todas partes al pequeño pueblo de la aurora.

• Muchos peregrinos subirán aquí [a la Santa Montaña] en 70 a 80 años. 

• Si Puerto Rico se hundiera, la [Santa] Montaña no se hundirá.

• La [Santa] Montaña está frente a Jerusalén, donde Dios derramó su sangre. 

• Al final de los tiempos, la [Santa] Montaña estará vestida de azul. Algunos intentarán alcanzarla, pero no podrán.

• Al final de los tiempos, los cuervos regresarán a la [Santa] Montaña.

• La [Santa] Montaña es el lugar donde se juzgará a los vivos y a los muertos.

• [El discípulo Abdón del Valle llevó una carta de Elenita al obispo de Puerto Rico, monseñor William Jones, pero el prelado respondió negativamente y] Nuestra Madre dijo: Veré al obispo y a los sacerdotes subir la montaña sin ser llamados; quienes me escucharon no vieron quién soy.

• Los sacerdotes no creen en mí, pero los espero en la [Santa] Montaña.

• Cuando el obispo suba a la [Santa] Montaña, ya será el final de los tiempos, o al mundo le quedará poco tiempo.

• Los sacerdotes dormirán en la [Santa] Montaña. 

• Al final de los tiempos, el Papa vendrá a la [Santa] Montaña.

• Apareceré como una paloma blanca en la [Santa] Montaña y en la casa de mi pueblo.

• Viajaré y no seré enterrada hasta que hayan pasado tres días. 

• Vendré a tomar a los que son míos.

• Siempre estaré en la [Santa] Montaña: algunos no me verán, pero sentirán mi presencia.

• Volveré a la [Santa] Montaña para el fin del mundo.

• La Virgen de la Aurora vendrá a la [Santa] Montaña.

• El Pueblecito de la Aurora crecerá aquí en unos 80 años.

• El Pueblecito de la Aurora estará tan lejos del Gran Día como la boca de la nariz.

• Habrá pocos sacerdotes.

•Las iglesias estarán cerradas pero deben rezar en sus puertas.

•  Vendrán falsos profetas que querrán conquistar la religión católica.

• Llegará el momento en que deberán colocar a las Tres Personas Divinas en las puertas.

• En los últimos tiempos, mi retrato llegará a la [Santa] Montaña y el final estará cerca.

• Un buen gobierno vendrá pero otros no serán así.

• Las mujeres votarán en las elecciones. 

• Se levantará un partido político que será muy difícil de vencer.

• Se levantará un partido político que corromperá a Puerto Rico.

• Puerto Rico será comunista por 48 horas y muchos sufrirán.

• El país será la ciudad y la ciudad será el país. Donde las espinas crezcan, la tierra será limpiada y donde la tierra esté clara crecerán las espinas.

• Habrá tierra frondosa verde y sin fruto. 

• Nadie querrá trabajar la tierra.

• Las mujeres tomarán los trabajos de los hombres. 

• Puerto Rico tendrá muchas carreteras.

• Habrá negocios uno encima de otro. 

• Habrá suficiente comida.

• El dinero vendrá a sus hogares, bendíganlo y utilícenlo.

• Llegará un momento en que no habrá necesidad de usar dinero. 

•Los hombres huirán de las mujeres.

• Cuando haya más luz, mayor será la oscuridad.

• Los valles de Puerto Rico serán pastos para peces.

• Las aguas del mar inundarán Yabucoa.

• Arroyo y Guayama arderán.

• Los hombres caminarán en el aire. 

• Los hombres viajarán en carretas sin bueyes y en caballos sin cabeza. 

• Cuando los hombres hablen entre sí sin verse, el final estará cerca. 

• Habrá demasiada ropa.

• Los hospitales estarán tan llenos, que darán veneno a los pacientes como medicina.

• Habrá casas hechas de hierro.

• El siglo 20 será el siglo de la luz.

• No habrá respeto.

• No habrá padres para niños, ni niños para padres.

• Habrá una guerra en la que arrojarán niños para hacerlos caer sobre las bayonetas.

• Los padres matarán a sus hijos.

• Las familias serán desconocidas.

• Las mujeres perseguirán a los hombres.

• Las mujeres se vestirán como hombres.

•Las mujeres caminarán desnudas.

•Los hombres morirán como animales.

• Bienaventurados los que aún conserven su mente en la década de 1960, muchos que vivirán más tiempo no la tendrán.

• Los gobiernos no estarán de acuerdo entre ellos.

• Habrá guerra universal. [Sucedió en 1914 y en 1939.]

• Apareceré al final de los tiempos, pero aun así los sacerdotes no creerán.

• Durante la última etapa del mundo el comunismo gobernará muchos países.

• Cuando vean personas moviéndose como hormigas que no se establecen en ningún lado, prepárense porque la llegada de Cristo está cerca.

•  Cuando el mar ruja tres veces y aparezca una cruz, ese es el final del fin de los tiempos.

• El último signo antes del final es una cruz que aparecerá en el cielo.

• Tres días antes de la Sentencia, no habrá agua; será oída pero no vista.

• El domingo y la víspera de Navidad será el final de los tiempos. Permanezcan en oración.

Este listado de profecías aparece en el libro de la autoría del Padre Jaime Reyes, La Santa Montaña de San Lorenzo, Puerto Rico, El Misterio de Elenita de Jesús 1899-1909. Puede acceder al mismo sin costo alguno visitando la sección Libros de este portal.